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Revista :Estúdio

versão impressa ISSN 1647-6158

Estúdio vol.5 no.9 Lisboa jun. 2014

 

ARTIGOS ORIGINAIS

ORIGINAL ARTICLES

Paco Pomet: la "restauración" de la mirada en la pintura

Paco Pomet: the "restoration" of the the gaze

 

Carlos Rojas Redondo* & Paco Lara-Barranco**

 

*Espanha, Pintor. Licenciado en Bellas Artes. Máster universitario en Arte Idea y Producción.

AFILIAÇÃO: Universidad de Sevilla, Facultad de Bellas Artes, Departamento de Pintura. Laraña, 3; 41003 Sevilla, España.

**Espanha, Pintor y profesor Titular de la Universidad de Sevilla. Doctor en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla.

AFILIAÇÃO: Universidad de Sevilla, Facultad de Bellas Artes, Departamento de Pintura. Laraña, 3; 41003 Sevilla, España.

 

Endereço para correspondência

 

RESUMEN:

Esta comunicación analiza dos aspectos fundamentales de la obra del pintor Paco Pomet: el hecho pictórico y la "restauración" de la mirada. La figuración surge como intermediario entre la materia pictórica pura aplicada y la contemplación del espectador. Crítica, ironía e ingenio culminan un proceso de creación de un mundo onírico donde la realidad define las posibilidades narrativas de la práctica pictórica.

Palabras-clave: Pintura / ironía / renovación / mirada / espectador.

 

ABSTRACT

This paper discusses two key aspects from the work of painter Paco Pomet: pictorial fact and the "restoration" of the gaze. Figuration emerges as an intermediary between pure pictorial substance applied and viewer's contemplation. Critique, irony and wit culminate a creating process of a dream world where reality defines the narrative possibilities of pictorial practice.

Keywords:Painting / irony / renewal / gaze / viewer.

 

Introducción

Esta comunicación centra su análisis en el trabajo creativo y pictórico del pintor Paco Pomet (Granada, 1970). Pretendemos resaltar las aportaciones que propone en sus obras mediante dos aspectos fundamentales: el hecho pictórico y la "restauración" de la mirada. "Restauración" entendida como la necesidad de "renovar la condición crítica" que el espectador ha de tener frente a la pintura. Algo que ya nos expusiera Jean Dubuffet en referencia al arte:

El arte debe proporcionarnos otra mirada, romper con todo lo acostumbrado, reventar todas las cortezas cotidianas, hacer estallar el cascarón del hombre social y culto, y mostrar las vías a través de las cuales pueden expresarse sus voces interiores de hombre salvaje (Dubuffet, 1992: 85).

La necesidad de crear inquietud y sorpresa en sus composiciones lo adscribe a ese grupo de pintores centroeuropeos que, desde la apariencia rigurosamente objetiva, provocaron el absurdo más impertinente de la Historia del Arte del siglo XX. El crítico Iván de la Torre Amerigui así lo destaca: "el artista granadino hace de la deformación física, en varias de sus telas, un lema que zahiere al espectador y le pone en la amarga -y delirantetesitura de decidir si creer o no" (de la Torre, 2004: 5). Si bien el autor declara:

Intento hablar de la perplejidad de estar vivo, del continuo placer y desasosiego que supone habitar un mundo que tiene infinitos sentidos y que al mismo tiempo no tiene ninguno, donde lo real y lo ficticio cohabitan, se alternan o se enfrentan (Hernández, 2006).

El cine clásico y la fotografía en blanco y negro, los personajes de series infantiles, el grupo británico Monty Phyton con su creador plástico Terry Gilliam, o los tebeos como su primera escuela de dibujo, muestran unas referencias esenciales en la obra de Pomet. Y unido a lo anterior, Gary Larson, con su serie The Far Side Gallery, constituye un excelente ejemplo para entenderlas.

Partiendo de lo indicado, en el primer apartado de nuestra investigación, La pintura por la pintura, se desvelan las motivaciones que impulsan al pintor granadino, para entender el hecho pictórico, el auténtico placer de pintar, con vinculación a pintores relevantes; en el segundo apartado, La primordialidad del significado figurativista, se destacan rasgos comunes teórico-artísticos con autores como Goya, Magritte, Fischl o Cucchi. Nuestra metodología ha sido de carácter analítico-comparativo (aplicada a los textos consultados).

 

1. La pintura por la pintura

Un hecho, determinante en la producción artística de Paco Pomet ha sido hacer del hecho pictórico una acción placentera en su práctica. La superficie de su pintura nos empuja al más puro oficio del pintor a través de la exhortación de lo matérico, siendo la máxima expresión del gesto y el gusto en la pincelada (Figura 1). Todo un acontecimiento visual que ya proclamara Jean Dubuffet al hilo de esta cuestión:

 

 

Hay que alimentarse de inscripciones, de trazos instintivos, respetar los impulsos, las espontaneidades antiguas de la mano humana que traza sus signos. […] La obra será más conmovedora, más humana y expresiva cuanto más evidente sea la mano del artista. […] En todos los detalles del cuadro debe percibirse al hombre con sus torpezas y sus debilidades (Dubuffet, 1992: 28).

Una pincelada empastada, suelta, libre de ritmo como en los versos surrealistas, con generosas dosis de materia oleosa reivindicándola por encima de lo narrativo. En la obra de Pomet se adivina un compendio de influencias, aunadas en su trabajo: el virtuosismo, el dominio y la afinación de una pincelada absolutamente certera desvelan la fijación del pintor granadino por emular a Velázquez; la capacidad técnica del óleo para describir un mundo onírico apunta a otro de sus maestros: Dalí ; una cualidad casi "comestible" de la pintura, que concentra exquisitez y sutilidad en sus chorreos y esconde una sensualidad por medio de la banalidad y frivolidad por los temas, también tratada por Guston; o ese apabullante control y capacidad organizativa de la composición, en clara referencia a Rauch. Grandes influencias que lo han llevado a ser autolimitado y contenido cromáticamente, donde el monocromatismo que se generaliza en sus obras se produce por el interés que le proporciona la luz, dramática y emocionante, de la fotografía en blanco y negro y los pintores tenebristas. La infografía, el graffiti, el cine, el cómic, la combinación con elementos del Pop Art, constituyen un pandemonio de apropiación que sirve al pintor granadino para crear un lenguaje particular y reconocible.

El color, al contrario que los fauvistas, abandona su función decorativa y adquiere un valor simbólico, intenso y expresivo, y el nombrado Dubuffet ya refería: "las características y la manera de aplicar el color son más importantes que la elección del mismo" (Dubuffet, 1992: 21). De este hecho, surge el azar con la pincelada, cómplices ambos y parejas en este baile, donde su inexactitud nos hace hablar de veleidades y aspiraciones ante la rebelión del material. De ahí, la pintura, en sí, tiene la ventaja de no poder ser reproducida, seriada, copiada y perdurar físicamente. Su independencia y su poder hacen que mantenga su originalidad y unicidad. El mismo Pomet nos expone su pasión por la pintura (Figura 2):

 

 

Es fruto del gusto por el material, porque el acto pictórico en sí es muy gustoso. Siendo radicales y echándole valor uno se lanzaría a pintar como algunos pintores cuando, en su estudio, lo hacían bailando encima del cuadro y dejándose llevar. […] me siento entre dos campos, en la dicotomía de ir hacia el gusto por la materia y lo pictórico, por el acto de pintar, y luego la necesidad de ser un ilusionista. […] Cuando la pintura es más pintura, es cuando no tiene que dar cuentas, nada más que ser ella misma (Rojas Redondo, 2012).

 

2. La primordialidad del significado figurativista

El mundo en el que vivimos es un tanto sardónico, hiriente y repulsivo, donde sólo la carcajada nos exime de una presión interior, de un enfado irracional ante la impotencia de no entender su funcionamiento. ¿O es que no hemos experimentado la situación de liberar una sonrisa en el momento menos adecuado? Pomet utiliza la ironía tanto para deformar la realidad, y mostrar sus perfiles más oscuros y menos digeribles, como para reírse de un mundo ilógico y banal. Otro de sus objetivos es hacer partícipe al espectador del juego que produce la construcción de una imagen "desestabilizante", que ha de ser pensada. Expone una visión ácida de los valores que sustentan nuestra sociedad, expresando con agudeza intelectual un discurso crítico (Figura 3):

 

 

Confío en el poder de la representación de la pintura. Es una fuente inagotable de creación de significado, una manera de hacer mundo. El principio activo, la figura, es el arma que la pintura posee para transformar lo instantáneo en duradero, una ficción que produce verdad (Castro Flórez, 2009).

A este respecto, Nietzsche ya afirmaba en su tiempo que era necesario:

[…] invertir esas ideas de repugnancia sobre lo terrorífico y absurdo de la existencia y transformarlas en representaciones con las que se pueda vivir: representaciones que son lo sublime, como el dominio artístico de lo horroroso, y lo cómico como la descarga artística de la repugnancia de lo absurdo (Nietzsche, 2004: 85)

Para entender el contenido de su figuración tendremos que echar una mirada a: uno de los grandes cronistas que supo transcribir en su pintura la crudeza de la realidad que vivió como Goya; quien nunca pretendió que entendiésemos nada de su figuración, sino que participásemos en el siempre infructuoso juego de la búsqueda de sentido como Magritte; una cruda figuración, casi pornográfica, que conforma el asumir sin tapujos la postmodernidad y la acelerada decadencia del hombre occidental contemporáneo con motivos que son negaciones a cualquier idealización, belleza o armonía, la de Fischl; y a un soñador donde sus dibujos son auténticos poemas visuales con una carga lírica de una intensidad y una seducción inagotables, haciéndose así un clásico contemporáneo Cucchi; entre otros. Ante estas grandes referencias, Foucault reseñaba a Magritte que había puesto en crisis uno de los principios básicos de la pintura occidental: "la equivalencia entre el hecho de la semejanza y la afirmación de un lazo representativo" (Foucault, 1989: 49), siendo esta afirmación perfectamente extrapolable a la obra de Pomet.

Paco Pomet reinventa esa mirada que tenemos demasiado aprendida de cómo mirar y analizar las imágenes que nos bombardean cada día los medios de comunicación y les pierde el respeto. El propio autor lo proclama: "[las imágenes] ponen en tela de juicio todo lo que se da por hecho. Van contra la inercia de la mirada" (Gallego, 2012). Pomet se sumerge en una recreación figurativa que trata de inspeccionar y analizar lo aprendido y heredado, además de nutrir esa inocencia que impulsa el tener que cuestionar posibles vínculos visuales, herencias estéticas, raíces o creencias, por la necesidad de mirarlo todo de nuevo con amplia expectación y transparencia.

Toma de referencia para muchas de sus obras, fotografías o imágenes de las cuales se apropia y modifica. Estas modificaciones conforman escenas fuertemente paradójicas o enigmáticas en las que el espectador se encuentra en situaciones difíciles de digerir cuando descubre lo irreal de la propuesta, como ante la deliciosa violencia narrativa y sangrante crítica a la que nos enfrenta Robert Hughes considerando a Schnabel como un Stallone de la pintura, a Warhol un farsante o desmontando el truco de la gallina de Rockwell (Hughes, 2002). Las apariencias, en las imágenes de Pomet, encierran significados más ambiguos, e implícitas hacia una orientación de significado, pero al estar tan abiertas a interpretaciones, la mirada del espectador ha de rematarlas.

La naturaleza hace presencia (Figura 4; Figura 5), atrapando al ser humano y haciéndolo suyo:

[…] donde el hombre deja de ser el centro del universo y percibe una nueva angustia ya que la inmensidad le causa una nostalgia indescriptible y un vacío asfixiante [porque intenta] reencontrar sus señas de identidad en una infinitud que se muestra ante él como un abismo deseado e inalcanzable [que le causa terror, pero al mismo tiempo] una ineludible atracción (Argullol, 2006: 10).

 

 

 

 

Esta misma sensación es la que, nos atrevemos a decir, debe experimentar el espectador ante las obras para afrontarlas, y volvemos a Dubuffet cuando declara: "El cuadro no debe mirarse de modo pasivo, la mirada del usuario no debe abarcarlo todo de una vez, sino que debe revivir su elaboración, reconstruirlo con su pensamiento, reactuarlo" (Dubuffet, 1992: 35). En definitiva, la obra de Paco Pomet es, y adueñándonos de palabras de John Berger que se adecuan perfectamente, "simétrica, ordenada, lúcida, como una parte de un crisantemo perfectamente desarrollado" (Berger, 1990: 81).

 

Conclusiones

Referidas a las conclusiones de nuestro estudio, cabría señalar dos. Una: Si bien la excesiva capacidad creativa y figurativa de Paco Pomet pudiera ensombrecer su calidad pictórica no hace sino reivindicarla y entregarnos un lenguaje puro, donde el oficio de pintar, se engrandece en favor del hecho plástico.

Dos: El mundo onírico que nos revela, no es sino la premisa del cambio, de la renovación de la mirada y su restauración, a través de una crítica irónica que provoque discusión y haga que nos adentremos en un paradigma creado única y exclusivamente, además de para su disfrute (con la materia) para su exploración (con las posibilidades narrativas de la ironía).

 

Referencias

Argullol, Rafael (2006) La atracción del abismo: un itinerario por el paisaje romántico. Barcelona: Acantilado. ISBN: 84-9648-963-9        [ Links ]

Berger, John (1990) El sentido de la vista. Madrid: Alianza. ISBN: 84-206-7098-7        [ Links ]

Castro, Fernando (2009) De la verdad en punctura: detalles y paradojas visuales en la pintura de Paco Pomet. Ayuntamiento de Cartagena. [Consult. 20120905]. Disponible en http://www.cartagena.es/frontend/genericas/detalle_noticia/_Mq4DsbcKUSLgtDxmqDI23Tqw2VXC5z6        [ Links ]

Dubuffet, Jean (1992) El hombre de la calle ante la obra de arte. Barcelona: Debate. ISBN: 84-7444-619-8        [ Links ]

Foucault, Michel (1989) Esto no es una pipa: ensayo sobre Magritte. Barcelona: Anagrama. ISBN: 84-339-1321-2        [ Links ]

Gallego, José (2012) "Pomet o cómo desaprender a mirar." el Correoweb.es, [Periódico electrónico]. [Consult. 2012-09-02]. Disponible en http://www.elcorreoweb.es/sevilla/146048/pomet/como/desaprender/mirar        [ Links ]

Hernández, Javier (2006). La Opinión de Zamora, en El arte verdadero crea sentido, revela verdades, ilumina, desoculta. [Periódico electrónico]. [Consult. 20120905]. Disponible en http://www.laopiniondezamora.es/zamora/1659/paco-pomet-ganadorprimer-premio-bienalzamora-arteverdadero-crea-sentido-revela-verdadesilumina-desoculta/170132.html

Hughes, Robert (2002) A toda crítica:ensayos sobre arte y artistas. Barcelona: Anagrama. ISBN: 84-339-1360-3        [ Links ]

Nietzsche, Friedrich (2004) El nacimiento de la tragedia. Santa Fe: El Cid Editor. ISBN: 14-135-2381-1        [ Links ]

Pomet, Paco (2013) Neutral [Consult. 2014-01-10] Reproducción de pintura. Disponible en http://pacopomet.es/gallery/portfolio/        [ Links ]

Pomet, Paco (2010) Atlas [Consult. 2014-01-10] Reproducción de pintura. Disponible en http://pacopomet.es/gallery/portfolio/        [ Links ]

Pomet, Paco (2009) Zzzz [Consult. 2014-01-10] Reproducción de pintura. Disponible en http://pacopomet.es/gallery/portfolio/        [ Links ]

Pomet, Paco (2009) Dionis [Consult. 2014-01-10] Reproducción de pintura. Disponible en http://pacopomet.es/gallery/portfolio/        [ Links ]

 

 

Artigo completo submetido a 16 de janeiro e aprovado a 31 de janeiro de 2014.

 

Endereço para correspondência

 

Correio eletrónico: carlos_20_basket@hotmail.com (Carlos Rojas Redondo)

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